Arriba a sus 14 años el Corredor Biológico en el Caribe, defendiendo la premisa de ser un mecanismo permanente de coordinación ambiental entre los países miembros: Cuba, República Dominicana, Haití y Puerto Rico, y un agente de entendimiento en la búsqueda de soluciones a diferentes problemas ambientales comunes en la región.
Como iniciativa busca contribuir a mantener los ecosistemas más representativos a escala regional y los procesos naturales que permiten sustentar la vida, no solo de la biodiversidad silvestre, sino también la vida de comunidades humanas que dependen de sus recursos para desarrollar actividades productivas sostenibles que mejoren su calidad de vida.
Importantes y diversas acciones multidisciplinarias consolidan los resultados de esta iniciativa medioambientalista que se proyecta durante más de una década por crear capacidades, planificar la conservación y fortalecer la gobernanza regional ambiental, promover, ejecutar acciones locales de desarrollo sostenible y crear herramientas e instrumentos para la toma de deciciones, y consolidar la cooperación entre naciones y organizaciones a favor de la protección del Medio Ambiente.
Aun cuando se han enfrentado en la región donde se enmarca diferentes situaciones difíciles como terremotos, epidemias, huracanes, entre otras, el compromiso de los países y organizaciones que integran el corredor se ha mantenido, y han encontrado soluciones que permiten continuar la marcha en favor de la conservación en el planeta.